A veces se le representa junto a San Nicolás, simbolizando al bien y al mal. Sus rasgos más característicos son su larga lengua, cuernos, ojos brillantes con una mirada maliciosa y su característico atuendo de pieles. Suele llevar además una vara, y a veces cadenas.
De un tiempo a esta parte, pues antes estaba mal visto por parte de la Iglesia principalmente, se celebran cabalgatas en estos países, en las que los participantes caracterizados de Krampus, tratan de asustar al público y darle algunos azotes.
Desde Podkitos propongo que traigamos a España esta costumbre. Hacer una “procesión” de estas troleando por ahí (¿Y producirla? ¿O hacer un corto, o una cámara oculta?), apetece.
¿Habéis sido mal@s? (Hmmm, como suena eso bribonazo pirata: ¡¡¡¡Azótame!!!!)